jueves, 11 de abril de 2013

Un viaje al pasado.

Sí, he vuelto a hacerlo, he vuelto a recordar cosas que tal vez no debería, he vuelto a recrearme en mil y un «y si...», he vuelto a imaginarme diferentes versiones de mí misma en distintos puntos de mi vida. Mi mente ha creado un pasatiempo que consiste en volver al pasado y recorrer los caminos que decidí no tomar, en aventurar cómo hubiese sido todo si, tanto yo como otras personas, hubiésemos tomado posiciones y decisiones diferentes. A veces lo hago como un intento de evadir la nostalgia y demostrarme que hubiese hecho lo que hubiese hecho nada sería diferente, otras simplemente para creer que todavía existe solución alguna aunque esta esté tomándose mucho tiempo en aparecer. Supongo que siempre he sido una ilusa, ¿no? Intentando siempre ver lo positivo, la parte buena e incluso creyendo que todo tiene una solución si nos tomamos la molestia de buscarla. La vida se empeña en decirme que no es así, que el pasado es pasado y ahí se queda, pero mi naturaleza cabezota me obliga a llevarle la contraria una vez más, no me gusta rendirme a la primera de cambio. Y como resultado aquí estoy yo, como siempre, hecha un lío de pensamientos y sentimientos variados. ¿Cómo pueden pasar tantas cosas por la cabeza de una persona? La verdad es que no lo sé. Lo único que sé es que mi cabeza nunca se toma la molestia de dejar de pensar por unos instantes y darme así un poco de paz. 

¡Ojalá existiese un botón de «apagar»!

sábado, 6 de abril de 2013

Recorrerte despacito se ha convertido en mi pasatiempo preferido. Perderme contigo entre las sábanas es sin duda el mejor plan que un fin de semana nos puede ofrecer. Besarnos hasta que duelan los labios es tan sólo el principio de todo lo que mi mente traviesa planea hacer. 

Hay quien dice que llevamos mucho tiempo, que soy muy joven y que tengo que disfrutar de la soltería antes de atarme a una persona, pero no saben que atarte no es más que el principio de todo lo que tengo pensado hacer contigo. Están ciegos si no son capaces de ver que eres tú el combustible de mi locura y que si tú no apareces en la ecuación no es posible diversión alguna. No soy una persona lo suficientemente positiva para pensar que esto será para siempre, pero mientras dure lo disfrutaré segundo a segundo porque nadie ha conseguido hacerme sentir lo que tú. 

A veces se cruza en tu camino una persona que consigue que todo fluya de manera natural, que parezca que os conozcáis de toda la vida cuando en realidad solo os habéis visto un par de veces y que seas tu misma sin vergüenzas ni timideces porque te demuestra que te aceptará seas como seas.  

Y esto es lo que yo tengo, aunque muchos no lo entiendan.